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Compsognathus: El de potente y veloz mordisco

Nombre: Compsognathus
Dieta: Carnívora
Peso: 3 kilogramos
Periodo: Jurásico Superior
Encontrado en: Europa

El Compsognathus fue un género de dinosaurios de los más pequeños que han existido. Habitaron en el planeta tierra durante el periodo Jurásico, hace aproximadamente 150 millones de años.

Se trata de un peculiar ejemplar que perteneció al grupo de los dinosaurios saurisquios terópodos coelosáuridos.

Este género habría tenido un tamaño muy reducido, de apenas 1 metro de largo, lo que se traduce en un peso ligero de apenas 3 kilogramos.

Sin duda este espécimen podría estar dentro de un ránking de los dinosaurios más pequeños jamás hallados. Aún así, existe un dinosaurio que es más pequeño que él, el Microraptor.

El Compsognathus gracias a su reducido tamaño y a sus relativamente largas patas en comparación con su cuerpo, fue un dinosaurio veloz, también debido a su larga cola que le servía tanto para mantener el equilibrio como para la función de locomoción.

¿Te has quedado con ganas de más información sobre el Compsognathus? ¡Entonces continúa leyendo porque aún queda mucho que contar sobre este pequeño dinosaurio carnívoro del Jurásico!

Taxonomía del Compsognathus

Reino Filo  Clase  Superorden Orden Suborden Infraorden  Familia Género
 Animalia  Chordata  Sauropsida  Dinosauria  Saurischia  Theropoda  Coelurosauria  Compsognathidae  Compsognathus
  • El ejemplar pertenece al reino Animalia.
  • Este dinosaurio se clasificó en el filo Chordata.
  • La clase a la que pertenece es Sauropsida.
  • Obviamente está clasificado en el superorden llamado Dinosauria.
  • Su orden es el denominado Saurischia.
  • El Compsognathus corresponde al suborden designado Theropoda.
  • Es considerado parte del infraorden Coelurosauria.
  • Se ubica dentro de la familia denominada Compsognathidae.
  • El género al que estamos haciendo referencia en este artículo es  Compsognathus.

En este punto es necesario mencionar que este género está formado por una única especie tipo (a través de la cual se realiza toda la descripción científica), denominada Compsognathus corallestris.

No obstante, esto no significa que no existan más especies, ya que el hallazgo de nuevos restos fósiles pertenecientes al mismo género pero con diferencias evidentes podría dar lugar a la descripción de nuevas especies.

Descubrimiento de este dinosaurio

Todo empezó cuando un grupo de paleontólogos procedentes del país de Alemania, se encargó de llevar a cabo una expedición en busca de vestigios de animales prehistóricos, precisamente en la mitad del siglo XIX.

Estos esfuerzos llegaron a tener un excelente resultado pues dieron con el paradero de un fósil que se encontraba en un estado de conservación muy deseable, lo que les iba a permitir después un estudio mucho más fructífero y completo del extinto ejemplar.

Descubrimiento Compsognathus

Fue casi 100 años después de este gran acontecimiento para el ámbito de la Paleontología, un poco más al sur del hallazo inicial, concretamente en Francia, se realizó otro encuentro de vestigios fósiles que resultaría altamente esclarecedor.

¿Sabías qué?...
Estos vestigios fósiles encontrados en Francia resultaron ser de este mismo ejemplar, un hecho que benefició en gran medida al proceso de estudio y descripción del Compsognathus, un evento que fue grandemente recibido por muchos científicos.

En un principio los investigadores alemanes creyeron que este ejemplar era en realidad bastante pequeño o de menor magnitud, debido a que el vestigio que hallaron en sus tierras era particularmente diminuto.

Se le llegó a comparar incluso con un pequeño gallo doméstico, pero después de lo que ocurrió en el país del sur, se percataron de que en realidad se trataba de un ejemplar que todavía no había llegado a la etapa adulta, a diferencia del fósil hallado en Francia, cuyo tamaño era mucho más considerable.

La alimentación del Compsognathus

En cuanto a la alimentación de este singular espécimen, se conoce mucho y con bastante seguridad, considerándose que este ejemplar se encargaba de cazar lagartos de tamaños menores pero ricos en proteínas, macronutrientes esenciales para poder sobrevivir.

Todos estos datos se conocen gracias a que se estudió de forma detenida y consciente el vientre de cada vestigio, los cuales aún se mantienen en un excelente estado de conservación, por eso no existe duda alguna  sobre la dieta de este ejemplar.

Poco después ocurrió un hallazgo similar pero solamente se trataba de unos elementos dentales que fueron encontrados en el país situado al sur de Europa conocido como Portugal.

No obstante, aún a día de hoy no se puede afirmar a ciencia cierta que estos vestigios pertenezcan al Compsognathus, no obstante, existen muchas posibilidades de que así sea.

Desde que se pudieron hallar los restos del animal, este causó mucha confusión inicialmente, por eso inicialmente no se le dio una clasificación correcta, a pesar de que se tenía una estructura ósea en un estado bastante deseable, un error que le costó muy caro a algunos investigadores de prestigio.

Durante mucho tiempo este extinto animal era el dinosaurio de menores dimensiones que había sido hallado a lo largo de toda la historia de la Paleontología, por ello era y sigue siendo un verdadero símbolo, una figura de estudio que hasta ahora sigue apasionando a muchos aficionados y profesionales.

¿Sabías qué?...
No obstante, la etiqueta de “dinosaurio diminuto” no le iba a durar por mucho tiempo, debido a que en la década de los 90 se encontró y se reseñó a un nuevo dinosaurio que en realidad vendría a ser un ave de la prehistoria, identificada bajo la denominación de Archaeopteryx.

Características de este dinosaurio

Se ha expuesto de forma constante las medidas de aquel animal y se afirma que no llegó a medir más de un metro de largo y su volumen no sobrepasaba los 3 kilogramos, como ya mencionábamos, durante mucho tiempo este fue el ejemplar más pequeño que había sido encontrado y estudiado.

No obstante, luego de años de consecuente exploración empezaron a aparecer otros extintos animales de mucho menor tamaño como por ejemplo el Microraptor y algunos otros que poco a poco daremos a conocer.

Este dinosaurio, Compsognathus, podía andar en posición bípeda, sobre las dos extremidades traseras, las cuales eran sólidas y a la vez bastante veloces.

La cola de este animal era bastante útil puesto que servía para dos funciones fundamentales en estos ejemplares: el equilibrio, y además de ello, la locomoción.

En cuanto a sus extremidades superiores, que se ubicaban en la parte frontal del animal, resultaban ser de mucho menor tamaño que las extremidades que se situaban en la zona contraria, en este momento nos podemos dar cuenta de la existencia de un trío de dedos que contaba con unas agresivas y potentes garras.

Dichas garras estaban total y perfectamente diseñadas para poder cazar a su alimento de modo muy veloz, ya que la forma de la que disponían impedía que la presa pudiese escapar de alguna manera.

En cuanto a la forma de su cráneo podemos divisar claramente que este era alongado y a la vez delgado,  contaba además con un hocico bastante curioso, este hocico terminaba en una punta, lo que le daba un aspecto parecido a las aves que conocemos en nuestros tiempos.

Características del Compsognathus

Del cráneo podemos decir que se encontraba compuesto de forma estratégica por 10 aperturas o depresiones que cumplían funciones específicas dentro de la estructura total del ejemplar.

Una de estas depresiones era la de las órbitas oculares, es decir, la zona en la que los ojos del animal se situaban, éstas eran bastante grandes y por ello se llegó a la conclusión de que los elementos visuales del Compsognathus eran también de un tamaño no menor, si comparamos estas órbitas con el resto de la estructura ósea.

¿Sabías qué?...
Ahora enfoquemos nuestra atención en lo que sería la zona de la mandíbula, podemos observar claramente que el área inferior de aquella presentaba una forma alongada también, la cual no poseía ningún tipo de agujero o apertura, estos agujeros (que no poseía) eran generalmente conocidos en los arcosaurios, y otros ejemplares también los presentaban.

En cuanto a sus elementos dentales podemos decir que resultaban ser aterradores, extremadamente afilados y listos para cortar cualquier tipo de material, ciertamente debemos admitir que no eran de gran tamaño pero resultaban ser bastante útiles.

Esta utilidad era debida a la forma y a la rapidez con la que podían ser utilizados, como pequeñas cuchillas listas para el ataque.

Además  debemos resaltar el hecho de que la dieta del ejemplar se encontraba basada en otros animales de menor tamaño, como ya hemos visto.

Esto significa que la poca extensión de los elementos dentales era la necesaria para que pudieran cumplir su función, incluso si se concentraba en cazar insectos, los dientes pequeños eran más que suficientes para poder triturar dicho material.

Y esto ha sido todo acerca de este pequeño pero feroz dinosaurio… Para finalizar, te dejamos con un vídeo sobre el Compsognathus lleno de útil información:

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